jueves, 2 de abril de 2015

Picasso ladrón! (por Alba Perez Romero)

Pablo Diego José Francisco de Paula Juan Nepomuceno de los Remedios Crispín Cipriano de la Santísima Trinidad Ruíz y Picasso no sólo se destaca por ser uno de los pintores con más "nombres de pila" que conozcamos. Dada su extensa trayectoria y variedad de técnicas también es uno de los artistas más prolíficos en la historia. Según el propio sitio Guinness, se estima que Picasso produjo alrededor de 13.500 pinturas y dibujos, 100.000 impresos y grabados, 34.000 ilustraciones para libros y unas 300 esculturas y cerámicas. Sus obras, por cierto, se encuentran también entre los objetivos centrales de numerosos ladrones de arte. Pero, ¿será esto meramente justicia poética?

Sabemos que en el año 1911, cuando -a instancias del estafador argentino Eduardo Valfierno- un ladrón italiano llamado Vincenzo Perugia robó la Mona Lisa del Museo del Louvre, tanto Pablo Picasso como el poeta Guillaume Apollinaire fueron interrogados por la policía parisina en el marco de sus investigaciones. Ambos eran ino­centes de ese robo, pero eran culpables (o al menos encubridores) de otro: el de varias cabezas antiguas de estatuas ibéricas, robadas en 1907 por  Honoré Joseph Géry Pieret, vinculado a Apollinaire, obras que Picasso tenía en casa desde entonces. Más allá de los avatares que Picasso y Apollinaire tuvieron para deshacerse de las obras y evitar ser encarcelados, lo cierto es que este robo se encuentra en la base de la obra fundacional del arte moderno:  Les demoiselles d'Avignon. Las tres figuras de la izquierda exhiben claramente rasgos faciales característicos de la escultura ibérica mientras que las dos figuras de la derecha muestran rasgos propios de las máscaras africanas. 




martes, 31 de marzo de 2015

Simonetta: la musa de Botticelli. (por Alba Perez Romero)

Tal vez sea el de Simonetta uno de los rostros más admirados en la historia del arte, particularmente en la obra de Sandro Botticcelli. Ella es Venus en El nacimiento de Venus, es Flora en La Alegoría de la Primavera, es Atenea dominando al Centauro, es María en la Virgen de la granada ... y es, Simonetta.


 

  



Nacida como Simonetta Cattaneo hacia 1453, a los 16 años se casó con el florentino Marco Vespucci. (pariente del futuro explorador): Su belleza cautivó a Lorenzo y Giuliano de Medici y también a numerosos artistas como los Ghirlandaio, Piero de Cosimo y por supuesto, a Alessandro Filippepi, más conocido como Sandro Botticelli.

Simonetta murió muy joven, con apenas 23 años, pero su rostro continuó inspirando a Botticcelli hasta la obsesión. A su muerte, pidió ser sepultado junto a ella. Su tumba, marcada por un disco de mármol blanco, se encuentra en una capilla del transepto de la derecha en la Iglesia de Ognissanti, de Florencia.  



viernes, 20 de marzo de 2015

La obra musical más larga de la historia (por Alba Perez Romero)

... es del compositor John Cage (1912-1992), el mismo que compuso 4' 33' de silencio.... y dura 639 AÑOS!

El título es "Organ2/ASLSP", las siglas de ’As SLow aS Possible’ (en inglés, ’lo más lento posible’)...y su interpretación se inició el 5 de septiembre del año 2001 en un órgano construido especialmente a dicho fin que se encuentra -encerrado en una caja de acrílico- en la iglesia de San Burchardi en Halberstadt, en Alemania. 




La pieza se inicia con un silencio por lo que el primer acorde recién sonó dos años después, y se ejecutó por un período de dos años. 

La partitura consta de 8 páginas, y una línea temporal colocada debajo marca las pautas temporales de su ejecución, con indicación de la fecha en que  deberá implementarse la ejecución de cada nuevo acorde. 



El cambio de acorde más reciente tuvo lugar el 5 de octubre de 2013. Si se lo perdieron, pueden reservar lugar para el próximo cambio de acorde, que tendrá lugar el 5 de septiembre del año 2020. La ejecución concluirá en el año 2640.


lunes, 2 de marzo de 2015

Osiris vegetantes (por Alba Perez Romero)

Originalmente, Osiris es un dios de la tierra negra, de las aguas de la inundación y de la fertilidad. También es un dios de la vegetación y de la fuerza germinativa de las plantas, en especial de las plantas cultivadas, como la cebada. Por esta razón, a partir del Reino Nuevo, es frecuente que en las tumbas se depositen los llamados Osiris vegetantes, como el que aparece en la imagen, hallado en la tumba de Tutankhamon. Un Osiris vegetante es básicamente una caja de madera con la silueta de Osiris, en cuyo interior se colocan tierra y semillas de cebada. El objeto se deposita en la tumba, y cuando la cebada germina, eso simboliza la resurrección del difunto.



           
          
  La vinculación entre Osiris y la vegetación explica también imágenes como la de la derecha, en que el dios está representado estirado, momificado, con espigas de cebada que brotan de su cuerpo.




            En general, en todas las religiones, los dioses de la fertilidad y de la vegetación, son también, al mismo tiempo, dioses de los muertos. En efecto, de la misma manera que las semillas se entierran para que fructifiquen, los difuntos se entierran para que se regeneren, para que renazcan, para que resuciten. De ahí que a Osiris se le llame Unennefer, que significa "aquel que está eternamente en buenas condiciones". En efecto, Osiris es un dios muerto, pero también es un dios resucitado. 

jueves, 26 de febrero de 2015

Los inmensos tapices del castillo de Angers (por Alba Perez Romero)

El castillo de Angers, en Francia, una impresionante edificación con 17 torres cuyos orígenes se remontan a la época romana, da albergue a una colección de tapices de enormes dimensiones.  No son tan conocidos como el famoso tapiz de Bayeux (que técnicamente no es un tapiz ya que se trata de bordados, pero bueno, dejando el detalle de lado ...) Tampoco han sido objeto de reproducción cinematográfica como los de "La dama y el unicornio" o los de "La caza del unicornio" que decoran la sala común de Gryffindor y aparecen en algunas escenas de las películas de Harry Potter. Y sin embargo constituyen una obra única en su género, de más de 800 metros cuadrados de superficie total, realizada en las últimas décadas del siglo XIV, y susceptibles de una triple lectura: religiosa, histórica y estética. 


La obra completa, inspirada en el Apocalipsis de San Juan (último libro del Nuevo Testamento), fue encargada por Luis I de Anjou (hermano del rey) a un pintor conocido como Jean de Brugges, que fue también el encargado de realizar los cartones-base. (La realización de un tapiz implica tres roles sucesivos: en primer término, el diseño pictórico, luego, la transferencia por ampliación de ese diseño a los cartones que constituyen la base del tejido, y por último la confección del tejido en sí) La factura del tapiz, realizada en el taller de Nicolás Bataille en un tiempo record de apenas siete años, es particularmente notable, no sólo por la belleza de su colorido (más allá del deterioro producto del descuido con que fue tratada durante siglos) sino sobre todo por la característica de que los tapices resultan absolutamente reversibles, no siendo visible por lo demás ningún nudo en la lana, lo cual evidencia una asombrosa maestría en su ejecución.




El esquema compositivo abarca seis tapices, cada uno de ellos con un personaje dominante en la parte superior, y debajo, dos registros de sucesivos "cuadros" cada uno, a manera de viñetas. Desafortunadamente, la obra sufrió variadas peripecias a lo largo de los siglos, por lo que algunas de sus partes resultaron mutiladas. No obstante, ya a partir del siglo XIX comenzaron los esfuerzos tendientes a su rescate y desde mediados del siglo XX la obra cuenta con una sala de exposición propia, adecuadamente protegida y actualmente en penumbras (para evitar el deterioro por la luz solar) en el castillo de Angers. Sesenta y seis escenas de las ochenta y cuatro originales pueden observarse. 





Desde el punto de vista religioso, resulta interesante señalar que en todos los tapices aparece la figura de  San Juan, ya sea como actor o como espectador, pudiendo identificárselo con facilidad por su manto rojo sobre túnica blanca o azul. Ahora bien, también cabe citar en relación a los tapices ciertos elementos históricos.: En efecto, concebida y ejecutada durante la Guerra de los cien años entre Francia e Inglaterra, pueden reconocerse en la obra algunas figuras contemporáneas, así como fenómenos de peste y hambre que asolaron la Europa del siglo XIV. Por último, desde el punto de vista artístico propiamente dicho, la obra presenta una peculiar conjunción de criterios estéticos típicos de la miniatura gótica y el incipiente realismo flamenco.  















miércoles, 25 de febrero de 2015

Un carrito de supermercado prehistórico. (por Alba Perez Romero)



Definitivamente, todos aquellos que estén familiarizados con la época de invención de la rueda se encontrarán intrigados ante la obra cuya reproducción acompañamos. En efecto, los registros más tempranos de tales artefactos nos remiten al territorio de la Mesopotamia asiática, unos 5500 años atrás. Y más aún, los primeros carritos de supermercado de que tenemos noticia se usaron en un supermercado en Oklahoma City allá por 1937. 
En consecuencia, esta obra, descripta como "Early Man goes to supermarket" (hombre primitivo va al supermercado) no puede sino ser una broma. Una más, en realidad, de las numerosas ya realizadas por un anónimo sujeto apodado "Banksy", quien ha introducido exitosamente sus fechorías, adhiriéndolas con adhesivo a las paredes de algunos de los museos más importantes del mundo: el Museo Británico y la Tate Gallery de Londres, el MoMa y el Metropolitan Museum of Art de New York, por ejemplo. 
En el siguiente video, obviamente filmado por un cómplice, lo podemos ver "en acción"


martes, 24 de febrero de 2015

Las marcas de Apis (por Alba Perez Romero)

Una importante divinidad de Menfis en el Antiguo Egipto era el toro Apis que se adoraba en la forma de un toro vivo.  Era un dios de la fuerza procreadora.

            Se asimilaba al dios Ptah, la principal divinidad de Menfis, y la fuerza procreadora del toro se identificaba con la fuerza creadora de Ptah. El toro Apis era sentido como la manifestación tangible, viviente del alma de Ptah.



            Pero también el toro Apis se vinculaba al rey. En efecto, una de las ceremonias más importantes del festival de Sed, es decir del festival de Rejuvenecimiento Regio, era una carrera que el rey corría junto con el toro Apis. De esta manera la fuerza regeneradora del toro se transmitía al rey.

            En tercer lugar, el toro Apis se asimila también al dios Osiris. Y cuando un Apis moría se convertía en un Osiris y entonces era convenientemente momificado y enterrado en un gran sarcófago de piedra, en una necrópolis en forma de catacumba que se hallaba en la localidad de Saqqara. Del sincretismo entre Osiris y Apis surge Osirapis que, en época tolemaica da a lugar al dios Serapis, adorado a lo largo de toda la época greco-romana. Del nombre de Serapis, se forma el término "serapeum" con el que los egiptólogos designan tanto el lugar de enterramiento de los toros Apis como cualquier recinto de culto dedicado al dios Serapis.

            En cuanto al aspecto del toro Apis, Herodoto en el libro tercero de sus historias dice lo siguiente:


“Este Apis, o Épafo, (Épafo es el nombre griego de Apis), es un novillo nacido de una vaca que después ya no puede concebir otra cría. Dicen los egipcios que baja del cielo un resplandor sobre la vaca, por el cual concibe a Apis. (En la tradición egipcia, este resplandor sería Ptah, puesto que Apis es considerado como el hijo de Ptah y de esta vaca virgen.) Este novillo llamado Apis tiene estas señas: es negro con un triangulo blanco en la frente, la semejanza de un águila en el lomo, los pelos de la cola divididos en dos mechones y un escarabajo bajo la lengua.”

lunes, 23 de febrero de 2015

El chocolate con leche y el Museo Británico (por Alba Perez Romero)

He aquí un retrato del señor Hans Sloane 



un médico protestante irlandés (contemporáneo de Bach y Haendel) a quien debemos el chocolate con leche y la creación del Museo Británico 

En efecto, Hans Sloane, quien dedicó su vida entera a la investigación científica y también al coleccionismo, fue comisionado como médico oficial del gobernador de Jamaica, destino en el cual accedió al conocimiento del chocolate usado por los nativos. En la isla el producto solía mezclarse con miel y pimienta, pero la mezcla resultaba demasiado fuerte para el paladar europeo. Así pues, para neutralizar la amargura original del producto, a Sloane se le ocurrió mezclarlo con leche, fórmula que a su regreso patentó. Su fórmula fue posteriormente adquirida por Cadbury (hoy parte de Mondelez International). 


Pero Sloane dejó a la humanidad un segundo legado. Ávido coleccionista, reunió durante su vida no sólo una notable colección de especímenes vinculados a las ciencias biológicas, sino también un conjunto de 200.000 artículos (incluyendo libros, manuscritos, joyas, monedas, objetos de culto y una selección de obras de arte procedentes de Egipto, Grecia, Roma, Medio Oriente, Extremo Oriente y América) que a su muerte, ocurrida en 1753, conformaron la base del Museo Británico. 



Actualmente el museo alberga una colección de ocho millones de artículos, de los cuales sólo unos 80.000 (apenas un 1%) se encuentra en exhibición en sus 194 salas. Pero la base de la colección fue el legado de Hans Sloane. 


domingo, 22 de febrero de 2015

Sobre amantes y armiños, o cómo Cecilia acaricia a Ludovico. (por Alba Perez Romero)

Los mantos regios son realizados a partir de la piel de la rata de Armenia, más conocida como armiño. El animal es pardo en verano y blanco en invierno, época en que mantiene únicamente la mosqueta negra de la punta de la cola.





Una de las más famosas representaciones artísticas de dicha criatura es “Dama con armiño” de Leonardo Da Vinci, (si bien durante muchos años se dudó de la verdadera autoría de la pintura).



 

A pesar de las discusiones acerca de si el animal es un armiño o un hurón, lo que se sabe con certeza es que la retratada es Cecilia Gallerini. Leonardo Da Vinci la conoció en Milán, dado que ambos vivían en el mismo palacio: el Castillo Sforzesco, propiedad de Ludovico Sforza. De hecho, Cecilia Gallerini era la amante de Ludovico Sforza, uno de los principales mecenas de Leonardo da Vinci. 

Por su color blanco, el armiño es asociado a la pureza e inocencia. De allí que la retratada estaría investida de esas características. Pero una segunda lectura propone otra relación, de tipo  lingüístico,  entre el animal y la mujer: En griego, el armiño es “galé”, lo cual evoca el apellido de Cecilia, “Gallerini” Y finalmente, sabemos que uno de los apodos de Ludovico Sforza, más allá del más conocido -“El Moro”- era “L’ Ermellino” (un pequeño armiño). Con lo cual el animal en los brazos de Cecilia Gallerini sería una alusión al propio Ludovico Sforza. Desde esta perspectiva, el cuadro pasaría a ser en realidad una pintura representativa de los amantes, cuya relación estaría expuesta de una manera sutil.

Este cuadro es uno de los cuatro únicos retratos femeninos que realizó Leonardo en toda su vida. Los otros tres son la archifamosa “Gioconda”, “Ginevra de Benci” y “La belle Ferronière”.

“Ginevra de Benci”    



“La belle Ferronière”


Volviendo a la historia del cuadro de Da Vinci, la pintura pertenecía a la colección de arte de la familia polaca Czartorysky.

Cuando Alemania invade Polonia en la Segunda Guerra Mundial, la obra se salva de las bombas pero no de los soldados nazis, que encuentran esta pintura escondida en uno de los castillos de la familia Czartorysky y la envían a un museo alemán. Al año siguiente, el gobernador general de Polonia Hans Frank (que en realidad era un militar alemán), solicitó que la obra fuese restituida y la pintura fue colgada en una de sus oficinas. Al finalizar los conflictos bélicos, las tropas aliadas o, más precisamente, los denominados "Monuments Men"  -encargados de rastrear las obras de arte que habían sido expoliadas o escondidas- encontraron la pintura en una de las mansiones de Hans Frank en Baviera (Alemania). La recuperaron y la devolvieron a Polonia, donde actualmente se expone en el Museo Czartoryski de la ciudad de Cracovia.



Soldados aliados en la Estación Central de Ferrocarril de Cracovia, Polonia
                                            

Los goliardos, Carmina Burana y Carl Orff. (por Alba Perez Romero)

"Carmina Burana" es el nombre dado a un codex medieval que contiene más de 250 poemas de los siglos XI y XII, hallado en 1803 en un monasterio benedictino de Bayern, al sur de Alemania. Hoy dicha obra se encuentra en la Biblioteca del estado de Baviera, en München.




            Su nombre proviene de “carmen”, que significa “canción” en latín, y “Burana”, que es la forma latina del gentilicio que indica su procedencia (de Beuern o Benediktbeuern) y están escritos en latín, alto alemán medieval y antiguo francés o provenzal.  Los poemas y canciones son obra de los llamados “goliardos”, estudiantes universitarios que al tiempo que llevaban una vida viajera y disoluta, escribían canciones sobre la bebida y el juego, poemas amatorios de alto voltaje y sátiras mordaces del gobierno y las jerarquías eclesiásticas.


            En 1936, Carl Orff puso música a 24 de estos poemas. El tema de apertura y de cierre, "O Fortuna", en el que se invoca a la diosa romana de la suerte y el destino, es el más famoso y ha sido utilizado en reiteradas oportunidades como banda sonora de películas tales como “Excalibur” (1981) o “La hija del general” (1999). 

O Fortuna en versión de André Rieu




Trailer de Excalibur (1981)




Versión completa de la obra: (71 minutos)







lunes, 16 de febrero de 2015

Simbología de las deidades de los vasos cánopos (por Alba Perez Romero)

En las siguientes imágenes se identifica claramente al dios egipcio Osiris, sentado en su trono de juez de los muertos, acompañado de Isis y Neftis. Delante de él tenemos a Horus, que acompaña al difunto. Ahora bien, ¿qué significan esas cuatro figuras posadas sobre una flor de loto que se encuentran entre Osiris y Horus?



            Se trata de los Hijos de Horus, cuatro dioses cuyas referencias es dable encontrar ya en los textos de las pirámides del Imperio Antiguo.



            Durante el proceso de embalsamamiento, las vísceras del difunto se introducían en unos receptáculos llamados vasos cánopos. La imagen siguiente representa una escena de traslado del difunto donde tras el cuerpo se ubica una especie de trineo custodiado por un chacal en la parte superior en el que se transportan los vasos cánopos del difunto.  Las imágenes inferiores muestran algunos ejemplos de tales vasos cánopos.







            En el Reino Antiguo, tales recipientes tenían tapas comunes, sin ninguna forma en especial, pero posteriormente se brindó a cada uno de ellos una tapa con determinada imagen conforme un protocolo específico, correspondiente a los cuatro Hijos de Horus cuya función era custodiar los diversos órganos. Así pues, los vasos cánopos exhibían tapas con cabeza humana, de mono, de chacal y de halcón, representativas de estos cuatro dioses, custodios del hígado, los pulmones, el estómago y el intestino, respectivamente. 


miércoles, 11 de febrero de 2015

Serafines y querubines. (por Alba Perez Romero)

Según el cristianismo, los ángeles son criaturas supernaturales que median entre Dios y los hombres. Pero no son todos iguales. Existe tradicionalmente toda una jerarquía cuya sistematización se remonta a la obra del llamado Pseudo Dionisio Areopagita, un teólogo y místico bizantino. (No condunfirlo con el Dionisio Areopagita "original·, mártir ateniense del siglo I convertido al cristianismo como resultado de la predicación de Pablo de Tarso, del que se habla en los Hechos de los Apóstoles). 

Este Pseudo Dionisio Areopagita en cambio vivió más de tres siglos más tarde, y su obra teológica y mística abarca cuatro tratados, de inspiración neoplatónica, que influyeron ampliamente en la escolástica europea medieval. 

En uno de dichos tratados, titulado "De Coelesti hyerarchia" (La jerarquía celeste) este autor elabora una clasificación de los ángeles en nueve órdenes, distribuidos en tres estructuras o escalones llamados "coros".  Basa esta clasificación en textos del Nuevo Testamento, particularmente las Epístolas a los efesios y a los colosenses.  

Las categorías de serafines y querubines serían las dos más elevadas de esta estructura jerárquica, mientras que los arcángeles y los ángeles constituirían, en contraste, las dos de menor rango. 

La siguiente obra representa la Asunción de María, creencia cristiana compartida por las iglesias católica y ortodoxa en el sentido de que a su muerte, la madre de Jesús fue elevada milagrosamente al Cielo en cuerpo y alma. Para los católicos, este traslado milagroso es tenido por dogma de fe desde 1950, en que fue proclamado como tal por el Papa Pío XII. Pero independientemente de su consagración como dogma, hecho que tuvo lugar recién a mediados del siglo XX, la temática fue objeto de numerosas representaciones pictóricas a lo largo de la historia. La siguiente, realizada por Francesco Botticini, un pintor renacentista que, al igual que Leonardo, Perugino, Ghirlandaio y Botticelli,  estudió con Andrea del Verrocchio, tiene la particularidad de mostrar claramente las tres jerarquías o coros angelicales propuestos en la obra de Pseudo Dionisio Areopagita. 



Serafines


Los serafines rodean el trono de Dios al tiempo que cantan eternamente el trisagio hebrero «Kadosh, Kadosh, Kadosh». Se supone que sólo pueden ser percibidos por quienes hayan sido elevados a una dimensión superior y su posterior descripción les atribuye una entidad zoomórfica alada (con seis alas para los serafines y cuatro para los querubines). A mayor abundamiento, la iconografía representa a los serafines de modo tal que el primer par de alas esconde su rostro  y el tercero cubre sus pies. 

Querubines

Los querubines, guardianes de la luz, se representan, como anticipáramos en el párrafo precedente, con dos pares de alas. Ciertas interpretaciones atribuyen a Lucifer el carácter original de querubín, ya que su nombre significa "Portador de luz". lo cual constituiría una referencia a dicha condición.
La palabra querubín se encuentra escrita en caracteres cuneiformes, en textos procedentes de las culturas mesopotámicas, acadia, asiria y babilónica. En dicho contexto, los querubines eran guardianes de las puertas que adoptaban el aspecto de toros alados con cabeza humana. (por ejemplo, cabe mencionar las puertas del templo de Ishtar actualmente conservadas y exhibidas en el Museo de Pérgamo de Berlín) En contraste, la forma que adoptaron los querubines en el cristianismo se asemeja más bien a la de los "putti", amorcillos acompañantes de la diosa Venus y su hijo Cupido en la tradición grecorromana. 


martes, 10 de febrero de 2015

Iconografía de Ptah: los símbolos ankh, djed y was (por Alba Perez Romero)


Según algunos egiptólogos, el propio nombre de Egipto pudo derivar del egipcio Hut-ka-Ptah, o sea, "Morada del ka de Ptah", que es el nombre que se daba en la Baja Época a un santuario del dios y, por extensión, a toda la cuidad de Menfis. Cuando los griegos llegaron a Egipto, oyeron este nombre Hut-ka-Ptah aplicado a la ciudad de Menfis, lo extendieron a todo el país, lo helenizaron en la forma Aigyptos y de ahí deriva nuestro Egipto.

ICONOGRAFÍA DE PTAH.

            En cuanto al aspecto del Dios, se le representa como un ser antropomorfo momificado, con las manos saliendo de las vendas de momificación y sosteniendo un largo cetro que termina en la parte superior con tres símbolos superpuestos, el inferior es el Pilar Djed, símbolo de estabilidad,  el central es el Símbolo Ankh de la vida y el superior es el Cetro Was, símbolo de poder.

            El dios lleva en la cabeza un casquete y está colocado sobre una tarima en forma trapezoidal que puede simbolizar tanto la Colina Primordial como la vara de medir que utilizaban los artesanos.

            Pero además de crear como artesano, el dios Ptah crea a través de un mecanismo completamente distinto. Crea a través del Verbo divino, como se recoge en un texto fundamental conocido con el nombre de cosmogonía menfita. La cosmogonía menfita se halla esculpida en la llamada “Piedra de Shabaka”. Este texto puede ser comparado con el capítulo uno del Génesis o con los versículos uno-catorce del capítulo uno del Evangelio de Juan, donde el Dios Bíblico crea también a través de la palabra.

            El texto egipcio dice así:

" El corazón se ha manifestado bajo el aspecto de Atum. La lengua se ha manifestado bajo el aspecto de Atum (aquí Atum debe ser entendido no como el dios Solar creador sino simplemente como un Símbolo de fuerza creadora, es decir, lo que se dice es que el corazón se manifiesta como fuerza creadora y la lengua se manifiesta como fuerza creadora). Esta fuerza creadora es Ptah, el Antiquísimo, quien ha dado (vida) a todos los Dioses y a sus ka a través de este corazón y a través de esta lengua. Sucede que el corazón y la lengua tienen poder sobre todos los demás miembros, uno concibiendo lo que él (es decir, Ptah) desea, y el otro, ordenando lo que él desea. (En efecto para los egipcios, la sede del conocimiento era el corazón y no el cerebro). La vista, el oído, la respiración, éstos informan al corazón. Él es el que hace posible todo conocimiento, y es la lengua la que repite lo que el corazón ha pensado. Así nacieron todos los Dioses y fue completada su Enéada. Cada palabra del Dios se manifestó según lo que el corazón había pensado y la lengua había ordenado.
Así fueron creados todos los oficios y todas las artes, la actividad de las manos, el movimiento de las piernas, el funcionamiento de todos los miembros, de acuerdo con esta orden que el corazón ha concebido y la lengua ha expresado, y da lugar a la aparición de todas las cosas. Así, Ptah es llamado "el autor de todo, aquel que ha creado a los Dioses". Porque él es la Tierra Emergida, el que ha creado a los dioses, de quien ha salido cada cosa, alimentos y vituallas, ofrendas divinas y toda suerte de cosas buenas. En efecto, siendo la Tierra Emergida, Ptah es la tierra. Se identifica con la tierra. Y es de la tierra de donde salen los alimentos, las vituallas, las ofrendas divinas y toda suerte de cosas buenas. Así Ptah estuvo satisfecho después de haber creado todas las cosas, todas las palabras divinas. También el dios bíblico está satisfecho después de haber terminado su obra creadora. Él ha creado a los dioses, él ha hecho las ciudades, él ha fundado los nomos, él ha colocado a los dioses en sus santuarios, él ha organizado sus ofrendas, él ha fabricado sus cuerpos de acuerdo con sus deseos. Es decir con los deseos de los dioses. Así los dioses entraron en sus cuerpos. En este caso se refiere a las estatuas divinas. De todo tipo de madera, de todo tipo de piedra, de todo tipo de arcilla, de cualquier cosa que crece sobre él. Y en tanto que tierra que es, puesto que como decimos, Ptah es la Tierra Emergida. Y en la que ellos se pueden manifestar. Así todos los dioses y sus ka quedaron fundidos con él, contentos y unidos con el Señor de las Dos Tierras.”


EL PILAR DJED


El pilar Djed era el símbolo egipcio representado por una columna con base y capitel. En la parte superior de la columna el capitel estaba dividido en cuatro barras paralelas. Era el símbolo del dios Osiris y representaba su columna vertebral.

            Cada nuevo faraón mandaba erigir una columna djed a gran escala para conferir estabilidad a su reinado, conforme al modelo divino. El mismo la enderezaba cuando la columna estaba tumbada en el suelo. De este modo recreaba la columna vertebral de su reino. Este acto también representaba la resurrección de Osiris en el nuevo gobernante. También formaba parte de las fiestas del Jubileo Real y mediante su celebración se simbolizaba la estabilidad del reinado, la resurrección de Osiris y la victoria de éste sobre Seth. Esta ceremonia ritual se realizaba con el objeto de renovar, regenerar y revitalizar periódicamente las fuerzas del faraón, para que pudiera seguir reinando.

            Asimismo era utilizado como amuleto de estabilidad y regeneración que aseguraba a su poseedor longevidad y fortaleza.

EL SIGNO ANKH


Símbolo de fuerza vital y vida eterna. El "aliento de vida" como llave que abre las puertas del camino hacia la inmortalidad y que también nos conduce por el camino correcto en los asuntos terrenales.      Símbolo también de la unión de los opuestos, masculino y femenino, representados con la forma de T y el círculo o forma oval, respectivamente.
            Portado habitualmente por los dioses para indicarnos su condición de eternos y sus competencias sobre la vida y la muerte. En muchos relieves y pinturas los vemos ofreciendo el "aliento de vida" a la boca o nariz de diferentes personajes.

EL CETRO WAS


El cetro was consistía en un palo recto con la base ahorquillada y coronado por una pieza inclinada con la forma de cabeza de una criatura desconocida (fabulosa quizás).

            En origen, este cetro pudo ser un fetiche imbuido del espíritu de un animal venerado, un simple bastón de pastor, o incluso el miembro de un toro. Según una teoría, la base ahorquillada podría representar las patas de un animal y el bastón podría interpretarse como el cuerpo o el largo cuello, parecido al de una jirafa, de la criatura. Sin embargo, la única parte que se representa a veces con detalles zoomórficos es la cabeza. Otra teoría lo identifica con la aorta de los mamíferos, representando la parte superior el cayado arterial que sale del corazón, la vara la aorta abdominal y la base en forma de horquilla la aorta femoral.

            A pesar de sus oscuros orígenes, este signo fue utilizado siempre con la connotación de "poder" y "dominio". Este contenido conceptual se pone de manifiesto en su uso iconográfico como atributo y emblema.

            Frecuentemente, el cetro was aparece agrupado con otros jeroglíficos, especialmente el ankh y el pilar dyed, en ciertos casos sobre cestos, con el significado simbólico de "toda vida, poder y estabilidad".